Si quieres vivir una vida feliz, átala a una meta, no a personas o cosas.
Si le apuntas a la luna, aunque te equivoques y no aciertes el tiro, al menos de seguro le pegarás a un estrella. Por eso, siempre apuntale a sueños que estén bien en lo alto, a sueños grandes, porque el Reino es para aquellos que se animan a concebir cosas grandes.
Si sales a cazar gacelas, preocúpate siempre de que los leones no te embosquen, pero si sales a cazar leones, las gacelas de seguro que no serán tu preocupación. Comienza a cazar cosas grandes para el Reino, las mas grandes de todas porque el Reino es de aquellos que se atreven a conquistar y a ir por mas.
Los que esconden sus talentos fingiendo humildad y espiritualidad no solo no engañan al Señor sino que lo poco que tienen le es quitado y es transferido al que se animó a ir por más. Vé por mas, para que tus dones crezcan, porque al que mas tiene, mas se le dará.
Cuenta la estrellas del cielo y las arenas del mar. Así será tu legado, en lo espiritual y en lo físico, si tan solo crees a Dios. Y hasta donde te atrevas a mirar y todo lo que pise la planta de tus pies, todo eso te será dado. Esto es, todo aquello que te atrevas a creer, hasta donde llegue tu fé (tu mirar) y todo lo que acciones (tus pies), todo lo que te muevas para conseguirlo. Cree y acciona y lo tendrás, no importa lo lejos que estés mirando.
H.R. Bernachea
Recuerda...
Posted on jueves, 10 de julio de 2008 by Román in
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El Poder de la Fe,
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Motivacion
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