Genesis 49
Entonces Jacob llamó a sus hijos y les dijo: “Reuníos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los días postreros. Reuníos y escuchad, hijos de Jacob; escuchad a vuestro padre Israel: ... ... “Gad: Un batallón lo atacará; pero él les atacará por su espalda.
Algunos cientos de años después ocurrió lo que leemos en Marcos 5:
1 Y VINIERON de la otra parte de la mar á la provincia de los Gadarenos. 2 Y salido él del barco, luego le salió al encuentro, de los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo, 3 Que tenía domicilio en los sepulcros, y ni aun con cadenas le podía alguien atar; 4 Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y los grillos desmenuzados; y nadie le podía domar. 5 Y siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, é hiriéndose con las piedras. 6 Y como vió á Jesús de lejos, corrió, y le adoró. 7 Y clamando á gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes. 8 Porque le decía: Sal de este hombre, espíritu inmundo. 9 Y le preguntó: ¿Cómo te llamas? Y respondió diciendo: Legión me llamo; porque somos muchos. 10 Y le rogaba mucho que no le enviase fuera de aquella provincia. 11 Y estaba allí cerca del monte una grande manada de puercos paciendo. 12 Y le rogaron todos los demonios, diciendo: Envíanos á los puercos para que entremos en ellos. 13 Y luego Jesús se lo permitió. Y saliendo aquellos espíritus inmundos, entraron en los puercos, y la manada cayó por un despeñadero en la mar; los cuales eran como dos mil; y en la mar se ahogaron. 14 Y los que apacentaban los puercos huyeron, y dieron aviso en la ciudad y en los campos. Y salieron para ver qué era aquello que había acontecido. 15 Y vienen á Jesús, y ven al que había sido atormentado del demonio, y que había tenido la legión, sentado y vestido, y en su juicio cabal; y tuvieron miedo. 16 Y les contaron los que lo habían visto, cómo había acontecido al que había tenido el demonio, y lo de los puercos. 17 Y comenzaron á rogarle que se fuese de los términos de ellos. 18 Y entrando él en el barco, le rogaba el que había sido fatigado del demonio, para estar con él. 19 Mas Jesús no le permitió, sino le dijo: Vete á tu casa, á los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti. 20 Y se fué, y comenzó á publicar en Decápolis cuan grandes cosas Jesús había hecho con él: y todos se maravillaban.
Luego leemos en Marcos 7:31 que Cristo vuelve a Decápolis:
31 Luego regresó Jesús de la región de Tiro y se dirigió por Sidón al mar de Galilea, internándose en la región de *Decápolis.32 Allí le llevaron un sordo tartamudo, y le suplicaban que pusiera la mano sobre él. 33 Jesús lo apartó de la multitud para estar a solas con él, le puso los dedos en los oídos y le tocó la lengua con saliva.[i]34 Luego, mirando al cielo, suspiró profundamente y le dijo: «¡Efatá!» (que significa: ¡Ábrete!). 35 Con esto, se le abrieron los oídos al hombre, se le destrabó la lengua y comenzó a hablar normalmente. 36 Jesús les mandó que no se lo dijeran a nadie, pero cuanto más se lo prohibía, tanto más lo seguían propagando.37 La gente estaba sumamente asombrada, y decía: «Todo lo hace bien. Hasta hace oír a los sordos y hablar a los mudos.»
Interesante, porque le trajeron un sordo mudo y lo apartó de la multitud. Quien le habló a las multitudes de Decápolis del Poder de Cristo? El gadareno comisionado por Cristo para predicarles y que dos versículos antes fué a las diez ciudades para contarles todo lo que Cristo había hecho en el y la gente, evidentemente, le creyó al gadareno !
Entonces:
Jacob profetiza a su hijo Gad que un batallón lo iba a atacar pero el iba a salir en victoria, Cristo llega a la tierra de los gadarenos (los descendientes de Gad) y libera al endemoniado por una legión (batallón) de demonios, de modo que el gadareno termina en victoria de la mano de Jesús. Los cerdos no eran permitidos para el pueblo de Israel al ser animales impuros y esos cerdos en particular segun algunos expertos y exégetas iban a ser sacrificados en el templo de zeus.
Los gadarenos se ofenden por la muerte de los cerdos que ellos tenían destinados a sacrificar a los ídolos y luego comerse y por ese motivo Jesús es expulsado de la tierra de los gadarenos, pero Cristo, como siempre y viendo mas allá, les deja al que fuera endemoniado, al gadareno, para que vaya y hable (en su lugar) a las diez ciudades.
Jesús le dice: Ve y hablales a los tuyos de las cosas maravillosas que viste y el gadareno sale rumbo a Decápolis (10 ciudades en griego) a predicar estos milagros del poder del Mesías.
Y ciertamente el gadareno predica en las 10 ciudades y lo hace bien, tan bien que cuando Cristo vuelve a Decapolis una multitud sale a recibirlo (y seguramente entre la multitud estaba el gadareno liberado de los demonios) y cuando Jesús sana al sordo la gente dice: Todo lo hace bien !
A mi siempre me habían enseñado esta palabra como dando a entender que Jesús se había quitado de encima al gadareno y todas esas cosas, pero no! Jesus comisionó al gadareno a predicar en 10 ciudades en su lugar.
Entonces el enfoque es totalmente distinto: Jesús se fué pero el Gadareno predicó en su nombre y prácticamente convirtió a las dos ciudades !
Y si leemos mas adelante en la Palabra leemos que Jesús fué sacrificado en la Cruz del calvario y el enemigo creyó que lo pudo expulsar de esta tierra para siempre pero El, tal como hiciera antes, dejó un batallón de gadarenos, un batallón de personas que alguna vez fueron atormentados y oprimidos por las fuerzas de la oscuridad pero que ahora libres predicaron, predicamos y predicaremos en su Nombre.
Nosotros somos aquellos gadaremos que alguna vez fuimos esclavos del pecado, de la enfermedad y la pobreza. Y al igual que aquellos gadarenos predicamos entre las ciudades del mundo del poder del Mesías Nazareno.
Y cuando Él regrese a esta tierra, al igual que cuando regresó a Decápolis, multitudes saldrán a su encuentro, habiendo sido predicados por nosotros, aquellos gadarenos redimidos y comisionados por el Mesías.
Entonces Jacob llamó a sus hijos y les dijo: “Reuníos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los días postreros. Reuníos y escuchad, hijos de Jacob; escuchad a vuestro padre Israel: ... ... “Gad: Un batallón lo atacará; pero él les atacará por su espalda.
Algunos cientos de años después ocurrió lo que leemos en Marcos 5:
1 Y VINIERON de la otra parte de la mar á la provincia de los Gadarenos. 2 Y salido él del barco, luego le salió al encuentro, de los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo, 3 Que tenía domicilio en los sepulcros, y ni aun con cadenas le podía alguien atar; 4 Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y los grillos desmenuzados; y nadie le podía domar. 5 Y siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, é hiriéndose con las piedras. 6 Y como vió á Jesús de lejos, corrió, y le adoró. 7 Y clamando á gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes. 8 Porque le decía: Sal de este hombre, espíritu inmundo. 9 Y le preguntó: ¿Cómo te llamas? Y respondió diciendo: Legión me llamo; porque somos muchos. 10 Y le rogaba mucho que no le enviase fuera de aquella provincia. 11 Y estaba allí cerca del monte una grande manada de puercos paciendo. 12 Y le rogaron todos los demonios, diciendo: Envíanos á los puercos para que entremos en ellos. 13 Y luego Jesús se lo permitió. Y saliendo aquellos espíritus inmundos, entraron en los puercos, y la manada cayó por un despeñadero en la mar; los cuales eran como dos mil; y en la mar se ahogaron. 14 Y los que apacentaban los puercos huyeron, y dieron aviso en la ciudad y en los campos. Y salieron para ver qué era aquello que había acontecido. 15 Y vienen á Jesús, y ven al que había sido atormentado del demonio, y que había tenido la legión, sentado y vestido, y en su juicio cabal; y tuvieron miedo. 16 Y les contaron los que lo habían visto, cómo había acontecido al que había tenido el demonio, y lo de los puercos. 17 Y comenzaron á rogarle que se fuese de los términos de ellos. 18 Y entrando él en el barco, le rogaba el que había sido fatigado del demonio, para estar con él. 19 Mas Jesús no le permitió, sino le dijo: Vete á tu casa, á los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti. 20 Y se fué, y comenzó á publicar en Decápolis cuan grandes cosas Jesús había hecho con él: y todos se maravillaban.
Luego leemos en Marcos 7:31 que Cristo vuelve a Decápolis:
31 Luego regresó Jesús de la región de Tiro y se dirigió por Sidón al mar de Galilea, internándose en la región de *Decápolis.32 Allí le llevaron un sordo tartamudo, y le suplicaban que pusiera la mano sobre él. 33 Jesús lo apartó de la multitud para estar a solas con él, le puso los dedos en los oídos y le tocó la lengua con saliva.[i]34 Luego, mirando al cielo, suspiró profundamente y le dijo: «¡Efatá!» (que significa: ¡Ábrete!). 35 Con esto, se le abrieron los oídos al hombre, se le destrabó la lengua y comenzó a hablar normalmente. 36 Jesús les mandó que no se lo dijeran a nadie, pero cuanto más se lo prohibía, tanto más lo seguían propagando.37 La gente estaba sumamente asombrada, y decía: «Todo lo hace bien. Hasta hace oír a los sordos y hablar a los mudos.»
Interesante, porque le trajeron un sordo mudo y lo apartó de la multitud. Quien le habló a las multitudes de Decápolis del Poder de Cristo? El gadareno comisionado por Cristo para predicarles y que dos versículos antes fué a las diez ciudades para contarles todo lo que Cristo había hecho en el y la gente, evidentemente, le creyó al gadareno !
Entonces:
Jacob profetiza a su hijo Gad que un batallón lo iba a atacar pero el iba a salir en victoria, Cristo llega a la tierra de los gadarenos (los descendientes de Gad) y libera al endemoniado por una legión (batallón) de demonios, de modo que el gadareno termina en victoria de la mano de Jesús. Los cerdos no eran permitidos para el pueblo de Israel al ser animales impuros y esos cerdos en particular segun algunos expertos y exégetas iban a ser sacrificados en el templo de zeus.
Los gadarenos se ofenden por la muerte de los cerdos que ellos tenían destinados a sacrificar a los ídolos y luego comerse y por ese motivo Jesús es expulsado de la tierra de los gadarenos, pero Cristo, como siempre y viendo mas allá, les deja al que fuera endemoniado, al gadareno, para que vaya y hable (en su lugar) a las diez ciudades.
Jesús le dice: Ve y hablales a los tuyos de las cosas maravillosas que viste y el gadareno sale rumbo a Decápolis (10 ciudades en griego) a predicar estos milagros del poder del Mesías.
Y ciertamente el gadareno predica en las 10 ciudades y lo hace bien, tan bien que cuando Cristo vuelve a Decapolis una multitud sale a recibirlo (y seguramente entre la multitud estaba el gadareno liberado de los demonios) y cuando Jesús sana al sordo la gente dice: Todo lo hace bien !
A mi siempre me habían enseñado esta palabra como dando a entender que Jesús se había quitado de encima al gadareno y todas esas cosas, pero no! Jesus comisionó al gadareno a predicar en 10 ciudades en su lugar.
Entonces el enfoque es totalmente distinto: Jesús se fué pero el Gadareno predicó en su nombre y prácticamente convirtió a las dos ciudades !
Y si leemos mas adelante en la Palabra leemos que Jesús fué sacrificado en la Cruz del calvario y el enemigo creyó que lo pudo expulsar de esta tierra para siempre pero El, tal como hiciera antes, dejó un batallón de gadarenos, un batallón de personas que alguna vez fueron atormentados y oprimidos por las fuerzas de la oscuridad pero que ahora libres predicaron, predicamos y predicaremos en su Nombre.
Nosotros somos aquellos gadaremos que alguna vez fuimos esclavos del pecado, de la enfermedad y la pobreza. Y al igual que aquellos gadarenos predicamos entre las ciudades del mundo del poder del Mesías Nazareno.
Y cuando Él regrese a esta tierra, al igual que cuando regresó a Decápolis, multitudes saldrán a su encuentro, habiendo sido predicados por nosotros, aquellos gadarenos redimidos y comisionados por el Mesías.